Todo actor con una larga filmografía
tiene algunos títulos que son casi desconocidos, bien por ser muy antiguos,
haber tenido poca distribución, poco éxito o mil factores más. Respecto a
nuestro héroe Sylvester Stallone, no muchos recordarán su cameo en “Bananas” de Woody Allen, la comedia
musical “Rhinestone” o el entrañable
mojonazo “La carrera de la muerte del año
2.000”. Sin embargo, hay un título moderno que permanece oculto para el
aficionado medio (que no sois vosotros, lectores de SlyMachine): se trata de “Reach me”, un film de 2.014 que tiene
todos los puntos para acabar siendo la película más desconocida de Stallone.
Por norma general,
me suelen gustar las películas corales: ese invento de Hollywood en el que se
juntan catorce mil actores de primera división interpretando a catorce mil
personajes con catorce mil historias cruzadas. Tras la inversión exagerada por
parte del estudio, al final vienen (casi siempre) los réditos en forma de
buenas críticas y éxito en taquilla.
Además, son películas que sirven para ver a actores conocidos en papeles más
cortos de la habitual pero muy diferentes a lo que solemos ver. La entretenida
saga “Ocean’s Eleven”, “Boogie nights” o “Magnolia” serían buenos ejemplos.
El amigo y jefe del
lugar, Carlos, ya comentó en esta anterior entrada (http://slymachine.blogspot.com.es/2014/07/bad-news-reach-me-official-trailer-2014.html) la noticia de que tito Sly
abandonaba el cine de acción por el drama, comenzando con la película “Reach me”. Teniendo en cuenta que se
halla en estos momentos en la preproducción de “Los mercenarios IV” y que los rumores de una quinta entrega de la saga
del tranquilo y afable personaje John Rambo son constantes, está bien claro que
de abandonar el cine de acción nada de nada; pero no es menos cierto que “Reach me” es un drama y en él, Sly no
golpea ni una sola vez (aunque tiene una mala hostia que da miedo).
“Reach me” es una especie de oasis en la
filmografía del actor. Se trata de una película independiente, lo cual no
implica que carezca de presupuesto, ya que aunque no aparezca ningún Al Pacino
o ninguna Glenn Close, y el elenco sea del tipo televisivo o cinematográfico
venido a menos, el gran número de actores implica un buen presupuesto. Así que,
si se le ha puesto la etiqueta de independiente es porque ningún estudio grande
está de por medio. En Estados Unidos tuvo una buena distribución en salas pero
al no gozar de un soporte publicitario grande (ahí es donde se nota la
diferencia entre un estudio modesto y una major)
tampoco fue un éxito. La crítica no ha sido muy entusiasta con la cinta y de
hecho, en la Biblia IMDB tiene una puntuación de 4.9. Y para colmo en España
sigue inédita incluso en DVD, lo cual hace que muchos fans no la conozcan.
Aunque para eso estamos.
Dirige y guioniza
John Herzfeld, cuya trayectoria es más bien televisiva, En uno de sus saltos al
cine se encargó de la muy interesante e infravalorada “15 minutos”, con Robert de Niro como protagonista. También se
encargó en el 84 de la comedia cursi “Tal
para cual”, que sirvió de segundo lucimiento para la pareja de moda
Travolta/Newton-John. Pero no podemos olvidar que también fue actor, e
interpretó el papel del sicario Cho en la magistral “Cobra: el brazo fuerte de la ley”, uno de los mayores éxitos de
nuestro ídolo Stallone. Entre ambos se fraguó una buena relación, y el actor
reconvertido a director siempre quiso tenerlo en alguno de sus proyectos. De
hecho, Stallone iba a ser el protagonista de “15 minutos”, pero una asociación de última hora entre estudios y
un incremento en el presupuesto, permitieron que se incorporase un actor de más
valía dramática como fue Robert de Niro.
John Herzfeld (conduciendo) en "Cobra" |
La trama de la
película es bien simple: “Reach me” es
el libro de autoayuda más exitoso de todos los tiempos y las redes sociales
arden comentando frases del libro (como los memes de Paulo Coelho). Se
desconoce quién es el autor; el único que lo conoce es su editor, el cual se ha
vuelto millonario y afirma que su representado no quiere saber nada de la fama;
es más, por voluntad propia, rehúsa cobrar la inmensa fortuna que le
corresponde por las ventas.
Ya os imagináis que tarde o temprano se acabará conociendo su identidad, y como buena película coral, las historias de todos los personajes acabarán confluyendo en torno al misterioso escritor.
Adjunto la
siguiente lista de personajes clave, pero emparejados, para no liaros en exceso.
COLETTE y EVE
Colette —Kyra Sedgwick (“Phenomenon”,
“Homicidio en primer grado”, etc.)— es
una madre que acaba de salir de la cárcel. Poco antes de ser liberada, ve un
reportaje en televisión sobre el libro de marras y tiene una visión: el
misterioso escritor necesita su ayuda.
Eve —Elizabeth Henstridge (“Agentes de S.H.I.E.L.D.”)— es su hija pizpireta y repelente, y que tiene que lidiar con ser la adulta en la relación madre-hija.
Eve —Elizabeth Henstridge (“Agentes de S.H.I.E.L.D.”)— es su hija pizpireta y repelente, y que tiene que lidiar con ser la adulta en la relación madre-hija.
WOLFIE y PADRE PAUL
Thomas Jane, un poli que atrae a la muerte |
Wolfie —Thomas Jane (“The
punisher”, “El cazador de sueños”, etc.)— es un violento policía con el
mayor récord de muertes en el cuerpo. Es más, a veces sus propios compañeros le
ayudan a tapar las muertes para evitar su expulsión. En el fondo es un buen
tipo que no quiere matar, pero es un imán para atraer las situaciones más jodidas
y peligrosas.
El padre Paul —Danny Aiello (“Érase una vez en América”, “Haz lo que debas”, “La rosa púrpura de El Cairo”, etc.)—, por su parte, es el párroco del barrio en el que vive Wolfie, y sufre el acoso de éste ya que cada vez que mata a alguien, siente la imperiosa necesidad de confesarse. Y el padre ya no sabe de qué manera mandar a la mierda al policía puesto que no hay “Padrenuestros” ni “Ave Marias” con el que obtener el perdón divino.
El padre Paul —Danny Aiello (“Érase una vez en América”, “Haz lo que debas”, “La rosa púrpura de El Cairo”, etc.)—, por su parte, es el párroco del barrio en el que vive Wolfie, y sufre el acoso de éste ya que cada vez que mata a alguien, siente la imperiosa necesidad de confesarse. Y el padre ya no sabe de qué manera mandar a la mierda al policía puesto que no hay “Padrenuestros” ni “Ave Marias” con el que obtener el perdón divino.
TOMMY, DENISE y FRANK
Tommy — Christoph M. Ohrt (“Alerta cobra”)— es un mediocre
director de cine que ha pedido dinero al mafioso Frank —Tom Sizemore (“El fin de los días”, “Paparazzi”, “Black
Hawk derribado”, etc.)— para financiar su próxima película. El problema es
que se ha fundido el dinero en operaciones estéticas para su novia Denise —Rebekah
Chaney (“Wasteland”, “Bobby Z”, etc.)—,
la que iba a ser protagonista de la película.
ROGER y GERALD
Roger —Kevin Connolly (“El
diario de Noa”, “John Q”, etc.)— es un joven periodista que se muere por
ascender en el periódico en el que trabaja. Gerald (NUESTRO DIOS STALLONE) es
el director y un pedazo de hijo de puta que dirige con mano de hierro a sus
subordinados. Aprovechando un chivatazo que sitúa al autor de “Reach me” en una determinada ciudad,
obligará al chaval a hacer un imposible periodismo de investigación.
TEDDY, KATE y WILSON
Tom Berenguer, un escritor en la sombra |
Teddy —Tom Berenger (“Orígen”,
“Platoon”, “D-Tox (Ojo asesino)”, etc.)— es el misterioso escritor, una
antigua estrella del fútbol americano que vive poco menos que en la indigencia.
Su hija Kate —Lauren Cohan (“The walking
dead”)— le ayuda en lo que puede y entre ella y Wilson —Terry Crews (saga “Los Mercenarios”)— intentan que dé el
paso y salga a la luz pública.
Como he comentado
antes, las historias se cruzarán entre sí y se acabarán uniendo a la del
escritor. Evidentemente no hablaré de esas combinaciones puesto que ya
entraríamos en el terrorífico mundo de los spoilers.
Tenemos muchos más
personajes, pero no merece la pena mencionarlos por tratarse de personajes
secundarios e incluso terciarios; aunque la gracia es que algunos están
interpretados por actores célebres, como Danny “Machete” Trejo, o son conocidos del entorno de Stallone, como
Kelsey Grammer —“Frasier”, “Cheers”, “Los
mercenarios 3”, etc.—, su propio hermano Frank o su hija pequeña Scarlett.
Como toda película
coral, no todas las historias ni todos los personajes son igual de
interesantes. La historia del mafioso y el director de cine es del todo
prescindible, mientras que la del policía loco y el sacerdote —que se cruza con
la de la madre y la hija—, es la más divertida. Y la historia del escritor, su
hija y su editor la más emotiva.
Siguiendo esa
premisa, tampoco todos los actores están al mismo nivel. Tom Sizemore exhibe en
todo momento la única expresión que conoce: la de malote que ya no impone; Elizabeth Henstridge mantiene el mismo aspecto de universitaria repelente
que lleva en “Agentes de S.H.I.E.L.D.”;
y Terry Crews se muestra divertido, sobreactuado y a punto de reventarle los
pectorales igual que en la saga “Los
mercenarios”, sólo que aquí no mata a nadie y viste de manera impecable.
En el otro bando, en el de las buenas actuaciones, destacaría a Danny Aiello, que no es que interprete un papel muy complejo, pero es un actor con un carisma y una presencia incuestionable; Tom Berenger, cuyo aspecto de sex symbol ha desaparecido para aflorar una especie de cosa amorfa y colorada, se muestra especialmente sensible y vulnerable, realizando una muy buena interpretación; Lauren Cohan ya ha demostrado con creces su nivel como actriz dramática en “The walking dead” y aquí mantiene dicho nivel; y la gran sorpresa viene de parte de Thomas Jane, ya que viendo su interpretación en “The punisher” o teniendo en cuenta que es el principal candidato a protagonizar el eterno remake de “Los inmortales”, es difícil imaginárselo con una vis cómica tan acusada como muestra aquí.
Y os estaréis
preguntando por qué no hablo de Sly. Bueno, había que dejarlo para el final.
Nuestro héroe sólo tiene tres escenas, pero nunca lo habréis visto tan hijo de
perra, tan despreciable y tan despreciativo respecto al resto de la humanidad.
Sin embargo, tiene tanto poder sobre el personaje del joven periodista Roger,
que su presencia aun invisible, es constante en la película. Roger, por cierto,
muy bien interpretado por Kevin Connolly, siempre tiene a su jefe en el
pensamiento: el artículo/misión imposible que le ha encargado puede ser su
pasaporte a la fama o una patada en el culo. Cuando además conozca al escritor,
a esa especie de mesías capaz de sanar cualquier trauma menos los suyos
propios, Roger empezará a plantearse si escribir sobre la verdad o escribir
algo sensacionalista como quiere su jefe.
En verdad, no sé si
este es el giro hacia el drama que Stallone comentó en su momento. Es cierto
que no pelea, ni dispara ni hace explotar nada, pero la violencia verbal de que
hace gala su personaje y su presencia intimidante están más cerca de un villano
de película de acción que no de un drama.
Respecto a un posible futuro estreno en DVD o
salas españolas, ruego, no, imploro a que el doblador habitual de Stallone no
se haga cargo de este proyecto. A medida que Ricardo Solans se hace mayor,
tiende a doblar a Stallone como un subnormal. Ahí está el terrorífico doblaje
de “Rocky Balboa” sin ir más lejos.
Teniendo en cuenta que Sly en todas las escenas de esta película está
chillando, no imagino a Solans doblándolo con su estilo actual.
En conclusión, “Reach me” no es ninguna maravilla, pero
tampoco merece ese 4,9 que tiene en la IMDB. No admite la más mínima
comparación con “Magnolia”, por
ejemplo, pero es una película de estas que aún con su parte de drama, te hacen
terminar de verla con una sonrisa de oreja a oreja. Y ver a nuestro ídolo en un
registro tan diferente mola mucho.
¡Eso sí, exijo un
spin-off con el personaje de Thomas Jane ya!
Escrito por Albert Sanz.
Escrito por Albert Sanz.